Ser Fotógrafo de Bodas es una pasión y una forma de vivir que me llena completamente. Amo lo que hago y no podría estar más agradecido por tener la oportunidad de documentar algunos de los momentos más preciados en la vida de las personas. Me encantan las cosas bonitas, los momentos reales y sinceros que hacen saltar al corazón. Me encanta la luz natural, las parejas enamoradas y las sesiones que transcurren entre risas. Pienso que el amor se captura mejor de forma sutil, íntima y bonita con sesiones donde nos hacemos amigos y te enamoras de nuevo de tu pareja.
Mi trabajo se centra en las emociones y en contar vuestra historia mediante fotografías. De estas dos ideas surge el nombre de esta web, Historias Que Emocionan (HQE). Por eso busco el equilibrio entre hacer fotos auténticas y sinceras de la celebración y la documentación de cómo se sintió el día de vuestra Boda. Desde lo íntimo a lo épico estaré totalmente presente para vosotros. Quiero que os sintáis relajados y que os divirtáis mientras trabajamos porque la fotografía ¡debería ser una experiencia increíble!
La vida avanza muy rápido. El mayor poder de la fotografía es que puede conseguir que los recuerdos no se vuelvan borrosos o incluso que se pierdan con el paso de los años. Mediante la captura y la conservación en el tiempo de un momento que fue, puede recordarnos por siempre cómo nos sentimos en aquel lugar y en aquel momento, cuál era aquella atmósfera única, las emociones que experimentamos y el amor que sentimos. El día de vuestra Boda es un día de magia y amor, de compartir y dar, de familia y amigos, de lágrimas y alegría. Gracias al poder de la fotografía, el día de tu Boda será un día al que volverás y recordarás como si fuera ayer por el resto de tu vida. Un día que contarás a tus hijos y nietos, que verán y se empaparán de las emociones que se desprenden de las fotografías.